Putos moros...

Bien, ya he llamado tu atención, ahora puedo escribir un poco.

Melilla. Marroquíes que están hasta la polla de lo que sea (nos informan de los altercados, los cartelitos, pero nadie dice porque ha empezado esta historia). Cuelgan unos carteles. Mujeres pertenecientes a la Policía Nacional ridiculizadas. Obviamente, nuestra amiga Bibiana Aído, aunque no le va una puta mierda en esto, se ha quejado. Si hubiesen ridiculizado a hombres del cuerpo de la Policía Nacional, hubiese cerrado la boca. Típico en gentuza de su calaña.

El ministro de interior, da la callada por respuesta. El de exteriores, tres cuartos de lo mismo. El único que abre la boca es el de fomento. Ese que nos quiere subir los impuestos aunque no sea su potestad. ¿Se está preparando para ser el próximo candidato a la presidencia por el PSOE? Sin duda, SÍ.

En fin, que el otrora presidente, Aznar, va y se presenta en Melilla, cuando nunca, en ocho años como presidente de España, se dignó a pisar Ceuta o Melilla. Ahora sí que va. Debería ir Mariano, no él, pero bueno, me comentan por ahí que para las próximas elecciones volveremos a ver a Ánsar en los carteles. Si lo va a hacer como en su primera legislatura, adelante, por mi parte, mal que me pese, tiene las puertas abiertas. Si su intención, como parece, es repetir su segunda legislatura, que se quede en casa.

Dicen que el rey ha llamado a Mohammed VI (el rey de Marruecos) a ver si apañaba el asunto, pero aquel está ocupado con concubinas y cachimbas. El de Marruecos. El nuestro está ocupado en fumar y operarse por la Seguridad Social de su cáncer de pulmón. Como si no nos chupa bastante ya el tío.

¿Y el amigo Zapatero? Desaparecido en combate. Bueno, desaparecido porque no sabe que cojones decir. ¿Cómo puede quedar gente que confíe en este pazguato? Cuando hay que poner los cojones sobre la mesa, el desgraciado este simplemente desaparece y salen Rubalcaba, Blanco, hasta la moñas de Aído a decir lo que él debería decir. Joder es que ni siquiera nuestra chachiministra de defensa hace nada... Y, ojo, me parece una de las mejores personas que han ocupado el trono del ministerio de defensa.

Y vista esta subnormalidad, ¿qué pasaría si son franceses quienes hacen lo mismo que han hecho los marroquíes? El Ilusionista ya hubiese viajado a París a joderle las vacaciones a Sarkozy. Pero se trata de Marruecos, importante fuente de votos en Cataluña y España (alaaa que he juntado ¡¡¡el agua y el aceite en una misma frase!!!), además de Andalucía. Son votos, no se pueden permitir decir nada. Pero resulta que yo soy francés además de español (aunque en la gilipollez soberana de este estado, en España soy sólo español, en Francia soy tanto francés como español, así está la cosa, si no eres fumbolero, no tienes derecho a la doble nacionalidad) y si El Ilusionista se metiese con Francia, quizá, si yo pensase en votarle a él, no le votaría.

Parece que es más importante la gente de fuera que los mismos europeos. Que, vamos a ver, pazguato, formas parte de Europa, no de África. Y eso que, de entre los inmigrantes, casi los únicos a los que acepto como ciudadanos, son los africanos. Pero cojones... Si se va a apoyar a cualquiera antes que a los nuestros, apaga y vámonos. Si el delito es el mismo, si la afrenta es la misma, ¿que es lo que diferencia lo que hace Marruecos de lo que podría hacer Francia? Absolutamente NADA.

Pero el desgraciado que dice ser "nuestro" presidente, quiere perpetuarse, una suerte de Hugo Chávez, un imbécil que aún cree posible la alianza de civilizaciones a la vez que facilita que Estados Unidos cree en España su base operativa para una guerra que sólo tiene el interés de crear un gaseoducto que atraviese Irán. Pero no pasa nada. Los "socialistas" (no lo son quienes siguen apoyando al lerdo este) seguirán aplaudiendo a El Ilusionista, creen en él. Os recomiendo releer los artículos que se van dejando aquí. En seis meses, un año a lo sumo. Entonces, me contáis.