Últimamente este blog viene recibiendo unas visitas la mar de curiosas. Que si desde el Ministerio de Interior, Ministerio de Ciencias e Innovación, Defensor del Pueblo (este es descacharrante, sobre todo si veis cual ha sido la vía por la que ha llegado). Aún no se han asomado los amigos Vandevelde, aunque, si lo han hecho, no creo que dejen ningún tipo de rastro. Señores de verde, échenles un cable a los de los Ministerios, que van dejando migas de pan allá donde pisan. ¡¡¡Me pido ser Hansel!!!
En realidad no se bien que pensar a raíz de todo esto. Asustarme... Como que no. Dudo haber dicho/hecho nada ilegal. Aunque sí que saco diversos posibles motivos.
A saber:
Los funcionarios se aburren, alguno ha leído algo del blog y se han ido pasando el enlace. Si es así, gracias a todos. Aunque os podríais estirar un poco y pinchar de tanto en cuanto en la publicidad, sería todo un detalle hacia una de esas personas que os pagan vuestro recientemente reducido sueldo. O quizá no se aburren, pero han decidido realizar una huelga de bolis caídos (aunque creo que ésta sólo la realizan los policías y demás, no me hagáis demasiado caso).
Puede que realmente sea un mini gran hermano (el original, no la mierda televisiva) y seamos muchos los que vemos como nos visitan desde estos mismos Ministerios. Quien sabe. Aunque, de ser así, ya hay que ser patéticos. Creo que hay cosas mucho más importantes ahora mismo que gastar el dinero en que una persona pueda dedicarse a visitar diariamente un blog de alguien que no tiene influencia alguna en absolutamente nada. Pero si esto es importante, si es importante visitar este y otros blogs, lo dicho... Pinchad de vez en cuando en la publicidad, que parte de vuestro trabajo lo tenéis gracias a mi.
No se me ocurren más motivos. No es muy normal esta oleada repentina de visitas y estos son los dos motivos que se me ocurren. ¿Alguien me dice cual es el correcto?
En todo caso, me parece que me decanto por la segunda opción. Sobre todo en vista de que aumentan exponencialmente las visitas desde que empecé a nombrar a la ministra Bibiana Aído. Si es así, algo buen podré decir de esta mujer.
Sea como sea, esto seguirá siendo lo que ha ido siendo en su corta no, cortísima vida. Este blog seguirá hablando de este país de pandereta donde no se salva ni el apuntador. Desde el primero de los españoles hasta el currito de la calle, todo el mundo forma parte de este país percusionista y tamborilero. Obviamente, por mi parte, los más habituales son ¿nuestros? ¿políticos? habituales. De tanto en cuando hasta se me ocurrirá decir algo bueno de alguno de ellos, aunque está complicado viendo el bajísimo porcentaje de ¿políticos? medianamente decentes que quedan por estos lares. Aunque hay ya un candidato (triste que sólo haya uno) para ser el protagonista de la primera entrada no ofensiva del blog. Espero que no implosione.
Me despido deseándoos una feliz tarde a todos, pasadlo bien y pinchad en la publicidad o dejaré formar parte de vuestro entretenimiento diario. O bueno, no, que me lo paso bien con las historias que van derivando de cada entrada que vamos publicando.
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