Me pone

"Bufff... Me he enterado que Amparo viene a vivir a mi ciudad. Hay que ver lo buena que está, el culito que tiene, como me pone... Recuerdo como pasábamos horas hablando de sus tetas. Y además de guapa, parece una fiera...".

Imagina que un hombre suelta esto en la radio. Tal cual. ¿Qué pasaría? ¿Alcanzas a imaginarlo? Doy por hecho que a ese hombre, llamémosle Antonio, le caerían hostias desde todas las instituciones, organizaciones, asociaciones y más cosas acabadas en -iones. Desde las comuniones también, que rima. Aparecería nuestra queridísima Bibiana Aído (en realidad no, pero como cada vez que la nombro, aumentan las visitas, me veo en la obligación de nombrarla) diciendo que hay que erradicar el machismo, que aún quedan machitos, que se debe seguir insistiendo en la educación, en el respeto.

Por supuesto, Antonio sería motivo de debates televisivos (al menos uno), noticias en el periódico, tendría que saltar a la palestra y decir que se arrepiente, que no era su intención, que nunca se le pasaría por la cabeza pensar en la mujer como un objeto, quizá incluso saldría su mujer junto a él para corroborar sus palabras...

Pero Antonio no existe, igual que Amparo, me los he inventado.

Quien sí existe es Pilar Rahola. Escritora y periodista. Como supondrás, es una mujer. Con motivo del fichaje de Mourinho por el Real Madrid, ha dicho en Onda Cero, literalmente, lo siguiente:

• Cómo culé estoy nerviosa con el fichaje de Mourinho, pero como mujer estoy encantada porque está buenísimo,
• Tiene un punto salvaje y arrabalero,
• El señor sube el caché, mejora el álbum de fotos,
• Me pone,
• Nosotras hablamos del culito que tiene Mourinho.

Aún no he oído a ninguna asociación pro-igualdad, ni a nadie del Ministerio de tan prostituído nombre abrir la boca al respecto. Y espero que no lo hagan. Me parece perfecto que una mujer hable así de sus deseos, de lo que le gusta. Igual que me parece perfecto que lo haga un nombre, sin que por ello se le demonice.

O todos podemos expresar abiertamente y CON RESPETO (manda cojones que decir estas estupideces pueda resultar ofensivo) lo que ha dicho esta señora, seamos hombres o mujeres, o mandan a Pilar Rahola a pedirnos disculpas a todos los hombres. Aunque no nos ofenda, igual que no ofende al revés. Antonio el imaginario, de haber existido y haber dicho lo que he puesto en su boca, tendría que haberlo hecho. ¿O quizá en un país con dos dedos de frente no hubiese tenido una mínima importancia?

Y sacad las panderetas, ¡¡¡que llegan tiempos más divertidos si cabe!!!